Por las mujeres!

Me pregunta Bruno, ¿qué se puede hacer, que sea moralmente valido?, Difícil respuesta, porque muchas cosas hay en el medio, precisamente las que no están en nuestras manos resolver, como “sanear” la policía, acabar con la corrupción, brindarles los servicios de los que carecen, como luz eléctrica, agua, etc.

Creo que más allá de las teorías que se han manejado, de asesinos seriales, ritos satánicos, entre otras cosas, algo de llamar la atención es que se trata de un problema de género, aunque muchos insistan en negarlo. Es una agresión directa contra las mujeres, y según, algunos informes, contra mujeres de determinadas características; chicas pobres, trabajadoras de la maquila, morenas, jóvenes, etc.

No es un problema sencillo de resolver, sobretodo porque los encargados de hacer cumplir las leyes, son precisamente quienes no las conocen y abusan de su poder, las violan de manera casi cotidiana. No creo que se trate de cambiar los códigos penales, sino de cambiar a quienes los aplican; y resulta casi imposible por vicios políticos que todos conocemos.

Un punto importante es la educación y no me refiero a la académica, sino a los valores, y a la manera en que hombres y mujeres nos relacionamos, ¿por qué en sociedades como la de Juárez, se sigue “viendo mal” que las chicas salgan a trabajar, que salgan a divertirse? ¿Por qué un estúpido procurador, cree que las “mujeres no deberían andar a esas horas en las calles”, que un toque de queda sería la solución? ¿Qué acaso estamos en medio oriente? Por qué cualquier hombre tiene el ¿poder?, de robarse a una niña de su casa, de llevarla a un hotel y después asesinarla y dejarla como una basura tirada en cualquier lote baldío.

¿Qué hacemos con esos psicópatas?, ¿habrá algo que hacer, con hombres que torturan, violan, cercenan y queman a las mujeres, por placer, por gusto, por venganza, qué se yo?

No es un problema sencillo, porque es un reflejo de años y años de vejaciones, porque las madres siguen educando a las hijas desde la sumisión y a los hombres desde el machismo, porque a las mujeres les siguen diciendo ¡ustedes se lo buscaron por ser tan “libertinas”!... ¿qué haces ante esto?

Nos queda la responsabilidad de seguir indagando en el tema, y hacer concientes a quienes nos rodean, que no es un hecho aislado, que le ocurre sólo a “algunas mujeres”, sino que el problema es tan ancestral, y tan cotidiano que da miedo. Lo vemos desde que nos subimos al metro y tenemos que cuidarnos de los patanes que no se conforman con intimidarte con sus palabras, sino que tienes que protegerte de que no te toquen… en fin miles de ejemplos hay al respecto.

Hay que preguntarnos seriamente, que hemos hecho o dejado de hacer para que estas actitudes misoginas sigan reproduciéndose…

Ixchel