La mitad de los mexicanos son pobres: UNAM
Señala un estudio que la pobreza ya alcanzó a los jóvenes profesionistas que concluyeron su carrera universitaria y no logran colocarse en un empleo digno, lo que provoca un crecimiento en la explotación a este grupo social.
La mitad de la población del país vive en condiciones de pobreza, y de ese total 25% pertenece al grupo de los excluidos sociales, informó Rosario Silva Arciniega, profesora de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En el estudio titulado Dimensiones Psicosociales de la Pobreza, Percepción de una Realidad Recuperada, la académica señaló que la pobreza ya alcanzó a los jóvenes profesionistas que concluyeron su carrera universitaria y no logran colocarse en un empleo digno, lo que provoca un crecimiento en la explotación a este grupo social.
La situación, abundó, se agudiza ante los altos índices de migración de las zonas rurales a la ciudad de México, y son precisamente los campesinos quienes forman los cinturones de miseria, las filas de niños de la calle, adultos y ancianos mendingando, quienes tampoco encuentran donde trabajar por falta de capacitación.
Lamentó que de acuerdo con las diversas mediciones que hacen de la pobreza en México, se habla de 40, 50, 60 ó 70 millones de pobres en el territorio nacional, cantidad que se incrementa cada vez más.
"La gente no tiene resuelto el problema de la subsistencia diaria, son personas que padecen muchísimo y que no pueden mirar hacia otro tipo de satisfactores o hacia otro tipo de alcance de libertad, amor y justicia, pues están sometidas al hambre y a la necesidad de comer", aseveró la investigadora.
Silva Arciniega explicó que las causas en el aumento de pobres en el país son la degradación del sistema social así como una apertura mal calculada de la liberación del comercio y la globalización.
Consideró que la política social en México ha fracasado, porque desde los años 70, cuando concluyó el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, el crecimiento económico fue leve, y con el sexenio de Luis Echeverría comenzaron las devaluaciones y la depreciación de la mano de obra.
El estudio, indicó, tiene el objetivo de trabajar la pobreza desde una perspectiva distinta a como se ha hecho, porque siempre se hace con valores estadísticos y económicos, pero nunca desde un punto de vista psicosomático.
La investigación se realizó en cinco años, y las encuestas en que se basó el diagnóstico se aplicaron a ocho mil 500 sujetos en las zonas pobres de las 16 delegaciones del Distrito Federal y en siete estados de la República.
Indicó que lo que le da valor al ser humano que vive en pobreza en México, se concentra en factores internos y externos, pues en los primeros se destacan las atribuciones y creencias, la familia, el conformismo, la seguridad básica contra la inseguridad; mientras que en los externos se encuentra el trabajo y el dinero.
"Para el mexicano la familia es la fuente de protección real que le permite, con toda la pobreza en que vive, seguir luchando y con el deseo de salir adelante", puntualizó.
En el estudio titulado Dimensiones Psicosociales de la Pobreza, Percepción de una Realidad Recuperada, la académica señaló que la pobreza ya alcanzó a los jóvenes profesionistas que concluyeron su carrera universitaria y no logran colocarse en un empleo digno, lo que provoca un crecimiento en la explotación a este grupo social.
La situación, abundó, se agudiza ante los altos índices de migración de las zonas rurales a la ciudad de México, y son precisamente los campesinos quienes forman los cinturones de miseria, las filas de niños de la calle, adultos y ancianos mendingando, quienes tampoco encuentran donde trabajar por falta de capacitación.
Lamentó que de acuerdo con las diversas mediciones que hacen de la pobreza en México, se habla de 40, 50, 60 ó 70 millones de pobres en el territorio nacional, cantidad que se incrementa cada vez más.
"La gente no tiene resuelto el problema de la subsistencia diaria, son personas que padecen muchísimo y que no pueden mirar hacia otro tipo de satisfactores o hacia otro tipo de alcance de libertad, amor y justicia, pues están sometidas al hambre y a la necesidad de comer", aseveró la investigadora.
Silva Arciniega explicó que las causas en el aumento de pobres en el país son la degradación del sistema social así como una apertura mal calculada de la liberación del comercio y la globalización.
Consideró que la política social en México ha fracasado, porque desde los años 70, cuando concluyó el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, el crecimiento económico fue leve, y con el sexenio de Luis Echeverría comenzaron las devaluaciones y la depreciación de la mano de obra.
El estudio, indicó, tiene el objetivo de trabajar la pobreza desde una perspectiva distinta a como se ha hecho, porque siempre se hace con valores estadísticos y económicos, pero nunca desde un punto de vista psicosomático.
La investigación se realizó en cinco años, y las encuestas en que se basó el diagnóstico se aplicaron a ocho mil 500 sujetos en las zonas pobres de las 16 delegaciones del Distrito Federal y en siete estados de la República.
Indicó que lo que le da valor al ser humano que vive en pobreza en México, se concentra en factores internos y externos, pues en los primeros se destacan las atribuciones y creencias, la familia, el conformismo, la seguridad básica contra la inseguridad; mientras que en los externos se encuentra el trabajo y el dinero.
"Para el mexicano la familia es la fuente de protección real que le permite, con toda la pobreza en que vive, seguir luchando y con el deseo de salir adelante", puntualizó.
Fuente: www.eluniversal.com.mx
lo escribió Ixchel a las 4:14 p.m.
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